El uso de materiales reciclados en jardinería ganó mucha popularidad en los últimos años, y uno de los trucos más curiosos —pero realmente efectivos— es colocar corchos en la tierra de las plantas.
Aunque parezca algo meramente decorativo, lo cierto es que tiene beneficios concretos para mejorar el estado del sustrato y la salud general de las plantas.
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Por qué los corchos son el aliado inesperado de tus plantas
Los corchos naturales tienen una estructura porosa que retiene y libera humedad de manera gradual.
Esto ayuda a equilibrar el riego, evitando tanto el exceso como la falta de agua.
Además, mejoran la aireación interna del sustrato, permitiendo que las raíces respiren mejor y evitando la compactación de la tierra.
Otro punto clave es su acción como barrera contra plagas.
Colocados enteros o triturados sobre la superficie, dificultan el acceso de insectos como mosquitos del compost, cochinillas o babosas, muy comunes en macetas de interior y exterior.
Cómo usar corchos en las macetas: paso a paso
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Corchos enteros o cortados: podés colocarlos sobre la superficie de la maceta o mezclarlos con la capa superior de tierra.
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En el fondo de la maceta: funcionan como parte del drenaje, ayudando a que el agua circule mejor cuando regás.
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Corchos triturados: se integran fácilmente con el sustrato y mejoran la aireación sin alterar el aspecto de la planta.
Es un método económico, sustentable y fácil de implementar, ideal para aprovechar corchos naturales de botellas que ya no uses.
Los beneficios de poner corchos en la tierra de las plantas
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Regulan la humedad y evitan que la tierra se seque demasiado rápido.
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Mejoran la oxigenación de las raíces.
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Favorecen un drenaje más eficiente.
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Funcionan como barrera natural contra insectos comunes.
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Ayudan a reducir residuos al reutilizar un material biodegradable.
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Mantienen la tierra más suelta y evitan la compactación.
El consejo de la experta: cómo salvar plantas secas con corchos
La especialista María Ferrarotto, conocida por su enfoque práctico en jardinería, explica que colocar corchos en el fondo de la maceta mejora la ventilación interna y evita que las raíces permanezcan encharcadas.
Esto es fundamental cuando una planta viene debilitada o con raíces resecas.
Según su recomendación, al trasplantar una planta que perdió vigor, colocar corchos enteros en la base más una capa de sustrato aireado puede ayudar a que rebrote con raíces nuevas y más sanas.
Cómo evitar hongos y malos olores al usar corchos
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Usá corchos triturados para mejorar la aireación del sustrato.
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Colocá una capa de piedras o corchos en el fondo para reforzar el drenaje.
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Regá solo cuando la superficie esté seca.
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Mantené las macetas en espacios ventilados y con buena luz natural.
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No dejes agua acumulada en los platos de las macetas.
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Revisá la tierra con frecuencia para detectar humedad excesiva o moho.
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Aplicá una pizca de canela o carbón activado si necesitás prevenir hongos.
Otros materiales reciclables que podés sumar a tus plantas
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Cáscaras de huevo trituradas
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Trozos de carbón vegetal
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Té usado seco
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Viruta de madera sin tratar
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Cáscaras de frutas y verduras compostadas
Cuándo conviene usar corchos en la tierra de las plantas
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Cuando hay problemas de exceso o falta de riego.
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Si la tierra se compacta con facilidad.
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Cuando las raíces están secas o presentan riesgo de pudrirse.
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Al trasplantar plantas a macetas nuevas para mejorar el drenaje.
Este truco económico y sustentable es una excelente forma de mejorar la salud de tus plantas sin esfuerzo y aprovechando materiales reutilizados.
