¿Te imaginas hacer unos pancitos suaves, esponjosos y deliciosos con ingredientes simples que seguro tienes en tu cocina?
Esta receta combina la magia de la harina, la leche y la levadura para crear panes irresistibles, perfectos para el desayuno, la merienda o como acompañamiento de cualquier comida. ¡Manos a la masa!
Ingredientes
Para la masa:
- Harina de Manitoba: 350 gramos
- Harina 0: 160 gramos
- Manteca: 50 gramos (a temperatura ambiente)
- Azúcar: 75 gramos
- Leche (latté): 300 ml (tibia, no caliente)
- Levadura fresca de cerveza: 12 gramos
- Sal: 1 pizca
Para el glaseado:
- Huevo: 1 unidad
- Leche (latté): 2 cucharadas
Preparación
1. Activar la levadura:
- Disuelve la levadura fresca en la leche tibia junto con una cucharadita del azúcar. Mezcla bien y deja reposar durante 10 minutos hasta que se forme espuma. Esto indica que la levadura está activa.
2. Mezclar los ingredientes secos:
- En un bowl grande, tamiza las harinas y mezcla con el azúcar restante y la pizca de sal.
3. Incorporar líquidos:
- Agrega la mezcla de leche y levadura a los ingredientes secos. Mezcla con una cuchara de madera o espátula hasta que se forme una masa.
4. Amasar:
- Incorpora la manteca blanda y amasa durante 10-12 minutos hasta obtener una masa suave, elástica y ligeramente pegajosa. Si es necesario, añade un poco más de harina, pero evita excederte.
5. Primera fermentación:
- Coloca la masa en un bowl ligeramente engrasado, cúbrelo con un paño limpio o film plástico, y deja que repose en un lugar cálido durante 1.5 horas o hasta que doble su tamaño.
6. Formar los pancitos:
- Divide la masa en porciones del tamaño de una pelota de golf (aproximadamente 50-60 gramos cada una). Forma bolitas lisas y colócalas en una bandeja para horno cubierta con papel pergamino, dejando espacio entre ellas.
7. Segunda fermentación:
- Cubre los pancitos con un paño y déjalos reposar nuevamente durante 30-40 minutos, hasta que casi doblen su tamaño.
8. Glasear y hornear:
- Precalienta el horno a 180 °C. Mezcla el huevo con las 2 cucharadas de leche y pincela los pancitos con esta mezcla. Hornea durante 15-18 minutos o hasta que estén dorados y suenen huecos al golpear suavemente la base.
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Consejos adicionales:
- ¿Sin harina de Manitoba? Puedes usar harina de fuerza como alternativa, aunque la textura será un poco diferente.
- Para un toque dulce: Agrega una cucharadita de esencia de vainilla o ralladura de limón a la masa.
- Almacenamiento: Conserva los pancitos en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 2 días. También puedes congelarlos y recalentarlos en el horno para disfrutar de su frescura.
- Variaciones: Rellénalos con mermelada, crema de chocolate o queso antes de hornear para una sorpresa deliciosa.
¡Disfruta de estos pancitos sabrosísimos, hechos con amor y los ingredientes más simples!
